ICSO UDP

No hay populismo sin pueblo: El fenómeno de Pamela Jiles


Medio:

Columna escrita por Lisa Zanotti, investigadora postdoctoral ICSO y Cristóbal Sandoval, estudiante del doctorado en Ciencias Sociales UDP. 

Mucho se ha hablado de la diputada chilena Pamela Jiles en los últimos meses debido a su polémico estilo de hacer política. Jiles ha sido tildada de populista y comparada con líderes como Donald Trump. Sin embargo, ¿es realmente Pamela Jiles un fenómeno político populista?

Desde su llegada al Congreso, y sus posteriores intervenciones tras el Estallido Social y la pandemia de la Covid-19, especialmente en torno a los tres retiros del 10% de los fondos de pensiones, se ha posicionado en el centro del debate político.

Su actual popularidad la ha llevado a aparecer en varias encuestas como una de las favoritas en la carrera electoral con el 20% de las preferencias (CADEM 2021), compitiendo con los candidatos de los partidos políticos tradicionales.

Proveniente de una familia de izquierda, vivió en Cuba hasta los 5 años, es nieta de la activista feminista Elena Caffarena y fue una periodista activa durante los años 80 del pasado siglo en contra de la dictadura militar. Fue militante del Partido Comunista hasta 2006 y estuvo vinculada al Frente Patriótico Manuel Rodríguez, donde conoció a su actual pareja y candidato a gobernador metropolitano Pablo Maltés.

FORJADA EN PROGRAMAS DE FARÁNDULA

Curiosamente, en los años 2000 tuvo un giro en su foco de interés, pasando del periodismo de investigación a formar parte de varios programas de farándula como “Sálvese Quien Pueda (SQP)” e “Intrusos”, que la nutrieron de un lenguaje directo y confrontacional.

El posicionamiento mediático adquirido por Jiles le permitió también incursionar en aventuras electorales que hasta 2017 no fueron exitosas. Tras un intento fallido de presentar una candidatura presidencial en 2009, finalmente apoyó la campaña del senador Alejandro Navarro. Además, fue candidata independiente a diputada en un distrito de la Región del Bío Bío, en la cual obtuvo 11 185 votos sin ser electa. De este modo, no fue hasta la última elección legislativa cuando, siendo parte del Partido Humanista y en la lista del Frente Amplio, fue elegida diputada en el Distrito 12 (La Florida, La Pintana, Pirque, Puente Alto y San José de Maipo) alcanzando 44 895 votos.

Como mencionamos, muchos tildan a Pamela Jiles de populista, sobre todo debido al hecho de que este término ha asumido una connotación negativa fuera de la academia. El fenómeno Jiles coincidiría con la definición de algunos académicos que entienden el populismo como un estilo político o performance altamente mediatizada que es independiente del contenido del mensaje político.

POPULISTA: ¿SI O NO?

Como afirman Moffitt y Tormey, “los políticos se han convertido en pseudocelebridades, y eventos políticos como algunas protestas llaman la atención por sus características estilísticas novedosas en lugar de por su «contenido” tradicional».

La alta mediatización de la manera de manera de hacer política de “la Abuela” –recordamos por ejemplo su llamativa celebración en el Congreso después de la aprobación del primer retiro de fondos previsionales– puede ser sin duda explicada a la luz de esta definición del fenómeno populista.

 

Compartir esta página: